viernes, 5 de junio de 2009

Sic transit gloria marmi

En esta noche de persianas cerradas,
voy a ahogar un verso de Saint-John Perse
bajo la luz blanca y seca que choca
contra el muro de mis mejillas.

En esta noche de esperanza tibia,
donde cantan tres sirenas quebradas
voy a arrancarle una página
al Ulises de Joyce.

Trataré también, con mayor o menor éxito
de olvidar una estrofa aprendida
que hablaba sobre la génesis del calor.

Hoy dejaré mi piel al borde de tu cama
para que caigan despacio mis cabellos,
ante tu silueta tierna de letra torcida.

1 comentario:

M dijo...

Dicen las malas lenguas, que este poemilla también es conocido como "Oda a una peluquera".